Nunca, desde la aprobación de la Ley de Dependencia, el sector que da servicio al conjunto de personas en situación de dependencia se ha visto en una situación tan límite como la actual, en la que los impagos del Consell a los centros se aproxima a un año completo y los centros temen tener que cerrar sus puertas y dejar de prestar un servicio esencial para la sociedad.
Frente a esta situación, que ha llevado a numerosos centros que ya están dejando de pagar las nóminas de sus trabajadores y entrar en una situación cercana al desabastecimiento, las patronales y sindicatos del sector, LARES, AERTE, CC.OO y UGT se han unido para exigir al Consell el pago inmediato de la deuda como único remedio para evitar lo que será una realidad dentro de muy poco: el cierre de centros y la pérdida de puestos de trabajo.
Retraso en el FLA
La hipotética tabla de salvación para el sector, en situación límite, que suponían los recursos que pudieran llegar al sector de la Dependencia por parte del Fondo de Liquidez Autonómica –FLA- (solución ofrecida desde la Consellería de Justicia y Bienestar Social durante las últimas semanas) también se difumina.
El reciente anuncio del aplazamiento de los recursos del Fondo de Liquidez Autonómica -FLA- de momento al menos de dos semanas, ha supuesto otro jarro de agua fría para un sector que comienza a ver en el cierre de centros y el despido de personal la única solución a su situación.
La patronal y sindicatos vienen solicitando a la Administración Autonómica la rápida solución de estos impagos, ahora con la habilitación del FLA por el Gobierno Central, toda vez que este retraso supone un paso más hacia la inviabilidad de la Ley de Dependencia en un momento en que los centros se han endeudado con elevados tipos de interés para prestar un servicio básico.
Los trabajadores llevan un mínimo de 3 meses sin cobrar, los proveedores comienzan a dejar de servir productos de primera necesidad y los dependientes y sus familiares se muestran cada vez más pesimistas por esta situación.
Sindicatos, patronales y dependientes
Frente a esta crítica situación, en la que el sector de la Dependencia comienza a temer por su propia supervivencia, las patronales Lares y Aerte junto a los sindicatos CC.OO y UGT protestan por una situación denigrante para las personas en situación de dependencia, impropia de un estado de bienestar como el que hemos tenido en España e injusta, pues se ceba con un colectivo especialmente vulnerable, sensible y sin soluciones a corto plazo.
Por ello, patronales, sindicatos, empresas, familiares y trabajadores comenzarán a realizar acciones de protesta, de forma conjunta, para demandar a la Generalitat Valenciana el cumplimiento de sus obligaciones para con la ciudadanía, en particular, con personas a las que no se les puede negar una atención necesaria para sobrellevar los aspectos más básicos de su día a día.