Las máscaras de protección facial aceleran la recuperación del deportista lesionado y le permiten continuar con su actividad, como ha ocurrido con el delantero del Espanyol Christian Stuani que sufrió una lesión la pasada semana y desde hoy martes se entrena con el equipo. Gracias a una de ellas el futbolista pudo jugar la última jornada de Liga antes de ser intervenido del arco cigomático por el equipo de Cirugía Oral y Maxilofacial del Hospital Quirón de Barcelona.
Un estudio publicado en el número de noviembre de la revista Prosthetics and Orthotics International añade que además de proteger, “las máscaras faciales pueden tener una función rehabilitadora en función de su diseño que permita adelantar el regreso del deportista a los terrenos de juego”. Los autores de la investigación señalan que para ello deben ser creadas de manera personalizada teniendo en cuenta los rasgos del atleta, pues tendrán unas características diferentes en función de la lesión, la longitud o la forma. Estas máscaras “son creadas con materiales transparentes y ajustables al rostro para consolidar los huesos fracturados”, añade el doctor Arturo Bilbao, presidente de la SECOM.
Cada vez es más habitual ver este tipo de máscaras entre los deportistas tras una lesión, siendo muy comunes en futbolistas, jugadores de rugby o de baloncesto. Deportistas como Kobe Bryant, John Terry o Martin Palermo, después de fracturarse la nariz, o Carles Puyol, tras una rotura de pómulo; han recurrido a estas protecciones para poder seguir jugando con sus respectivos equipos.
El deporte es uno de los principales causantes de las fracturas faciales junto a los accidentes de tráfico y las agresiones, según una revisión de estudios de la SECOM. La reparación de las fracturas del arco cigomático son clave para restaurar la anchura de la cara, explica el doctor Javier González Lagunas, jefe de servicio de Cirugía Maxilofacial de Quiron Barcelona. Los accidentes de tráfico, las agresiones y el deporte son las causas más frecuentes de fracturas en el maxilar superior y además son más sufridas por los varones jóvenes, según este experto. Las que tienen lugar en los huesos cigomáticos y nasales se relacionan más con el deporte y los accidentes con animales, según un estudio publicado en abril en la revista Brazilian Oral Research.
Lesiones frecuentes en el fútbol
Se calcula que 6 de cada 10 fracturas maxilofaciales sufridas por los deportistas están causadas por el fútbol, lo que se atribuye, sobre todo, a su alta implantación. “La mayor parte de ellas son debidas a la colisión con otro jugador, pero también pueden sufrir contusiones en la articulación temporomandibular así como fracturas múltiples debido a las patadas”, añade este especialista. Otros deportes con alto nivel de impacto en el rostro son el baloncesto y el rugby.
Las lesiones en el arco cigomático requieren de la intervención de un cirujano oral y maxilofacial, que va a realizar “una restauración tridimensional de la cara, teniendo en cuenta la altura, la anchura y la proyección del tercio medio facial para conseguir restablecer la continuidad y anatomía de los huesos de la cara”, explica el doctor González Lagunas.